Acaso me viste arañar los silencios
en esos desvelos eternos y amargos,
llorando el destierro de este sentimiento
herida y sujeta al dolor con las manos?
Acaso tus pasos notaron mis huellas
con esas cadenas haciéndome grietas,
dejando el camino tal vez mal herido
por el sufrimiento de cada sentido?
Acaso tu alma…silente y austera…
notó que la mía enfrentaba quimeras,
por esos desiertos de arena y de fuego
donde como un niño lloré sin consuelo?
Entonces te digo que nunca te atrevas
a verme a los ojos como si supieras…
que duele arrancarse del alma la vida
como si la herida no fuera mortal!
Eileen
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